La reciente amenaza de censura a la Revista Cáñamo edición mexicana y los supuestos indicios de delito en la publicación, que ha sido remitida a la fiscalía para que los valore y en su caso actúe penalmente, ha originado un gran movimiento de apoyo difundiendo la noticia y en defensa de la revista.
Desde Revista Cáñamo edición española hemos remitido una carta abierta al Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, Lic. Enrique Peña Nieto, exponiendo nuestra opinión y solicitando su intervención.
Cuando el pasado mes de abril trabajábamos, junto a nuestros compañeros mexicanos, en la elaboración del número 1 de la edición de Cáñamo México no podíamos evitar sentir cierta inquietud por las posibles reacciones de los variados actores que operan en la sociedad del país.
Es por ello que conocimos con agrado y cierta esperanza las declaraciones que Usted, en su calidad de Presidente de la República, pronunció en ese momento: “La libre manifestación de las ideas es una conquista de nuestro país social e irrenunciable, que hoy forma parte de la normalidad democrática México”.
La confianza en el respeto a la libertad de expresión nos llevó hace más de 18 años a iniciar la publicación de la edición española de Cáñamo y hace más de 10 la edición chilena de la misma publicación. Eran tiempos mucho más difíciles para debatir sobre drogas. En la actualidad el fracaso de la guerra contra las drogas, reiteradamente denunciado por nuestras publicaciones, es ampliamente admitido, hasta el punto que el año próximo se realizará una cumbre de la ONU, UNGASS 2016, con el propósito de modificar las actuales fallidas políticas.
El consumo recreativo del cannabis se encuentra despenalizado en diferentes países y la venta de marihuana para su utilización con fines terapéuticos o lúdicos es un hecho en diferentes lugares de Estados Unidos y en Uruguay.
En consonancia con las nuevas tendencias a nivel internacional nuestras publicaciones han venido defendiendo largamente la descriminalización de los consumidores y el establecimiento de políticas de reducción de daños. Con base en ello, hemos llamado al reconocimiento de la existencia de los consumidores como un hecho social consumado y realizado una labor de información, dirigida tanto a los mismos como a cualquier otra persona interesada en esta materia, tendente a la reducción de los riesgos que el consumo de cualquier tipo de sustancias conlleva.
En ese sentido se manifiesta, ante el patente desagrado de las autoridades competentes, Tito, artista integrante de la banda mexicana Molotov, en el número 1 de Cáñamo México al manifestar que en el caso de tomarse la decisión de consumir marihuana es preferible hacerlo a la edad más tardía posible.
Hemos informado también sobre los usos terapéuticos de la marihuana, puestos en cuestión durante años por prejuicios sociales y dudosos intereses económicos, y que en la actualidad se hallan ampliamente reconocidos por pacientes y comunidad científica. Las posiciones favorables al autocultivo de la marihuana se han sustentado en la necesidad de alejar a los consumidores de los circuitos del narcotráfico tanto por la ilegalidad de los mismos como por los diversos riesgos que su utilización conlleva tanto por posibles adulteraciones en el producto como por la proximidad a drogas bastante más nocivas que la marihuana.
Por sostener tales posiciones y pese al desagrado que han suscitado entre algunos detractores, jamás hemos sido censurados en España o Chile ni conocemos que ello haya sucedido en el caso de otras publicaciones similares de EEUU o Europa. No es este el caso de la Comisión Calificadora de la SEGOB que considera que la publicación “presenta artículos, reportajes, entrevistas, y notas con información referente a la planta del cáñamo, su consumo con fines recreativos, sus aplicaciones en el campo de la medicina, su impacto en diversas expresiones culturales y sociales y su marco normativo actual, entre otros TÓPICOS (…)”. Al mismo tiempo –como Usted quizá ya esté informado– esta Comisión de la SEGOB remitió el contenido de la publicación a la PGR para que determine si sus contenidos implican la comisión de alguna conducta ilícita penal.
Hacemos un llamamiento, a través de Usted, a la SEGOB para que modifique una línea argumental que se antoja, en su irracionalidad, propia de unas épocas marcadas por la represión, y atienda a los planteamientos científicos y políticos vigentes en la actualidad. Esperamos también que SEGOB atienda las declaraciones realizadas por Usted a propósito de la libertad de expresión. Del mismo modo, consideramos importante llamar a la opinión pública mexicana a posicionarse sobre su derecho a participar en el debate sobre drogas que se está llevando a cabo a nivel mundial y que tiene especial relevancia en el caso mexicano, dada la durísima posición que le ha tocado asumir en esta cruel guerra contra las drogas que afortunadamente va tocando a su fin.
Revista Cañamo