Fuente: Agencia EFE

9 de mayo, 2012

La adulteración de la cocaína se dispara y sólo el 5 por ciento de la que se vende es pura

Barcelona, 9 may (EFE).- La adulteración de la cocaína se ha disparado los últimos años y actualmente solo el 5 % de la que circula por España tiene una pureza del 100 %, según el último análisis de muestras de drogas de la ONG Asociación Bienestar y Desarrollo (ABD).

“Respecto a años anteriores han disminuido las muestras que solo llevan cocaína y se ha convertido en una de las sustancias más adulteradas”, ha resaltado hoy, en conferencia de prensa, la directora del programa de análisis de drogas de ABD, Energy Control, Núria Calzada.

A lo largo del 2011, Energy Control, que trabaja para el Plan Nacional de Drogas, analizó 2.797 muestras de sustancias psicoactivas procedentes de diferentes puntos de España.

De las 472 muestras que eran de cocaína en 2011, Energy Control descubrió que en el 79 % de los casos venía mezclada con adulterantes y diluyentes, mientras que el 16 % de las muestras no tenía nada de cocaína y solo el 5% era pura al 100 %.

Calzada ha asegurado que es difícil vincular los cambios en la adulteración con la crisis, aunque es una posibilidad, ya que “uno de los objetivos de mezclar sustancias es reducir los costes de producción y bajar el precio”.

En este sentido, Energy Control ha constatado en el último año que muchos consumidores de cocaína se han pasado a drogas más baratas como la anfetamina con respecto a la cual, aunque en 2011 se ha observado una menor adulteración que en años anteriores, en prácticamente el 80 por ciento de los casos se presenta mezclada con cafeína.

En el mercado, la cocaína se vende a unos 60 euros el gramo, mientras que en el caso de la anfetamina o “speed” la misma cantidad sale por 25 euros.

Los análisis de Energy Control revelan que en los últimos años la adulteración en la cocaína no ha parado de crecer y los análisis hechos en 2010 ya señalaron que sólo el 6 por ciento de las muestras eran puras.

En la mayoría de los casos, la cocaína se combina con tres adulterantes: la fenacetina, el levamisol y la cafeína.

La más habitual es la fenacetina, que es un analgésico ya retirado del mercado por su toxicidad que se encuentra en el 65 por ciento de las mezclas.

La cafeína, que se usa en casi todas las drogas, aumenta los efectos psicoactivos, pero provoca ansiedad, irritabilidad y taquicardias.

Por su parte, el levamisol es un fármaco usado en veterinaria como antiparasitario, que también está indicado en humanos para quimioterapia y que incrementa los efectos de la cocaína, aunque destruye el sistema inmunológico.

Otro de los adulterantes encontrados en los análisis es el dextrometorfano, un opiáceo que se usa para calmar la tos y que, mezclado con drogas, puede producir espasmos en el estómago, náuseas, disminución de la presión sanguínea y alucinaciones.

El informe Energy Control revela igualmente que, de las 203 pastillas de éxtasis analizadas, el 65 % contenían solo MDMA (metilendioximetanfetamina), que es la sustancia propiamente psicoactiva, mientras que en el 4 % de los casos se añadía adulterante y en el resto (31 por ciento) no había rastro alguno de MDMA.

La ONG también ha estudiado 687 muestras de cannabis, la gran mayoría de las cuales fueron de marihuana (74 por ciento) y en menor proporción hachís (24 por ciento), y en las que predominaba el THC (tetrahidrocannabinol), que es una de las sustancias del cannabis más psicoactivas.

Energy Control es el proyecto de reducción de riesgos del consumo de drogas de ABD con un ámbito de actuación es estatal y cuenta con delegaciones en Cataluña, Madrid, Islas Baleares y Andalucía.

La ONG efectúa controles de sustancias proporcionadas por consumidores para conocer los niveles de adulteración de las drogas y poder así advertir a las personas adictas del riesgo del consumo de las sustancias.

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