Fuente: El País
21 de junio, 2012
“Nueva Cultura”. Fernández Huidobro se remontó a la época de Richard Nixon para explicar el fracaso de la lucha contra el narcotráfico. Se buscará no afectar relación con países vecinos
La lucha por la legalización de la venta de marihuana será parte de la política exterior uruguaya. El proyecto que enviará el gobierno al Parlamento discrepa con los que habilitan el autocultivo de cannabis.
El gobierno anunció ayer en conferencia de prensa que enviará un proyecto de ley al Parlamento para habilitar la venta de cigarrillos de marihuana. El ministro de Defensa, Eleuterio Fernández Huidobro, explicó que la medida se adopta en el marco del combate al tráfico y comercio ilegal de drogas.
Según el ministro, el gobierno encabezará una lucha en los foros internacionales para que la venta de marihuana sea “una política exterior del Uruguay”, lo cual dijo está de acuerdo el canciller Luis Almagro.
Fernández Huidobro opinó que “una errónea decisión del presidente (de EE.UU., Richard) Nixon (al prohibir la venta de marihuana) ha sido la que ha provocado todos estos desastres declarando una guerra que ha sido ganada por los narcos”.
El ministro indicó que para evitar problemas con la región, el Estado debe tomar medidas de seguridad como la represión del contrabando.
El proyecto que remitirá en el próximo trimestre el gobierno al Parlamento difiere con las tres iniciativas que están a estudio en la Cámara de Diputados, debido a que habilitan el autocultivo de hasta ocho plantas de cannabis.
“Si habilitamos el autocultivo para uno o para dos, tenemos que habilitarlo para todo el mundo y ¿cómo controlamos eso?”, se preguntó ayer Fernández Huidobro al término de la conferencia de prensa.
Según el ministro, “los proyectos que hay en el Parlamento apuestan al autocultivo y despenalizan la producción. Nosotros discrepamos con el autocultivo por lo menos hasta que sea legalizado el consumo de manera generalizada a nivel internacional”, sentenció el ministro.
El gobierno aún no definió si la producción de cannabis estará en manos del Estado o de privados. Sin embargo, al principio la producción será estatal, dijo a El País el secretario general de la Junta Nacional de Drogas, Julio Calzada. En tanto, Fernández Huidobro no descartó que la producción pueda ser tercerizada a futuro.
Dentro del Poder Ejecutivo hay acuerdo para que el control de la producción de marihuana se encuentre bajo la órbita estatal. “Tenemos que tomar medidas para no afectar a los países vecinos. Para que no seamos acusados de ser un centro de fabricación y distribución de drogas. Por eso nos parece mejor el control del Estado sobre la producción de la droga”, insistió Fernández Huidobro.
El ministro indicó que la venta ilegal de marihuana persiste, porque hay una cantidad de personas que depende de los que comercializan.
Según dijo, el comercio negro de marihuana implica una facturación de US$ 75 millones al año para el mercado uruguayo que abarca un espectro de entre 120.000 y 150.000 personas. A eso se deben sumar las cifras referidas a la venta hacia el exterior y el lavado de activos que ronda en un 30% de ese monto.
“Toda esta combinación trágica de corrupción, enriquecimiento, capacidad de influir y de sustituir al Estado que lo estamos presenciando con dramatismo en otros países de América Latina y es lo que nosotros pretendemos evitar acá en Uruguay”, remarcó Fernández Huidobro.
El ministro de Desarrollo Social, Daniel Olesker, defen- dió el proyecto para legalizar la venta de marihuana y sostuvo que “comparar el consumo de tabaco y marihuana no tiene la menor sustentabilidad, por eso proponemos regular ese consumo”.