Fuente: El Pais
8 de agosto, 2013
Por Raquel Seco
“Vamos en ruta de regular no solo la marihuana, sino todas las drogas”
Manuel Granados, líder de la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal
La marihuana está de actualidad en México. Con el goteo de Estados de EE UU que se suman a la despenalización, y Uruguay regulando la producción, consumo y venta, la capital del país parece próxima en la lista. El gobernante PRD prepara una propuesta para la regularización del cannabis en un país que sufre desde hace años el azote del narcotráfico y que no ha osado contradecir al Gobierno de Estados Unidos. Y las ambiciones van más lejos de la ‘mota’: “Tenemos que regular no solo la marihuana, sino todas las drogas. Vamos en una ruta de regular todas las drogas, en el ámbito de nuestras atribuciones y competencias”, dice Manuel Granados, líder de la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal.
Granados insiste en que el PRD no tiene todavía una postura oficial sobre la regularización de la marihuana, aunque Vidal Llerenas, diputado perredista en ese organismo, prepara un borrador de propuesta que se asemeja al modelo de Colorado (EE UU), que en noviembre 2012 legalizó la posesión y venta para uso recreativo del cannabis. El presidente de la Asamblea insiste en que la propuesta definida para el DF, previsiblemente lista en noviembre, saldrá del foro internacional que se llevará a cabo en la Ciudad de México los días 2, 3 y 4 de septiembre. Participarán representantes de Naciones Unidas, la OMS y la Organización de Estados Americanos con el fin de “homologar criterios”.
Eso sí, subraya que como partido, el PRD no puede ser “parte del conservadurismo”. A pesar de ello, las opiniones más tibias han llegado últimamente de dentro. El secretario capitalino de Salud, Armando Ahued, dijo este lunes que no la marihuana no es “indispensable” desde el punto de vista médico. El secretario de Turismo del DF, Miguel Torruco Marqués, ha descartado los avances porque México no es un país “desarrollado”. “Antes de proponer la legalización debemos apostar a una política real de prevención”, opinó este martes la senadora Alejandra Barrales, que disputó la candidatura de la izquierda a la alcaldía de la capital. El excandidato presidencial del PRD, Andrés Manuel López Obrador, ahora líder del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), cree que la propuesta de regularización es una “cortina de humo” que tapa otras “prioridades” como la economía, la educación pública o la lucha contra la corrupción. “Me sorprende la posición de algunos compañeros del PRD, que tengan posicionamientos conservadores de la mano de la derecha de este país. Eso no puede ser, porque entonces no son de izquierdas, no son perredistas e ideológicamente no están cumpliendo con su papel”, comenta Granados, en términos generales.
Hasta el conservador PAN se ha mostrado dispuesto a debatir. “Nos ha dicho: vamos a esperar la presentación de iniciativas, y si nos convencen vamos con ellas… Ahora resulta que el PRI es mas derecha que el PAN”, dice el líder de la Asamblea.
“Nosotros a lo que hemos convocado a una revisión de las políticas de drogas en la Ciudad de México. Es cierto que dentro del marco de atención de drogas la que ha generado un debate internacional es la marihuana, pero nuestro debate no se centra en marihuana, sino en drogas legales e ilegales. Hoy por hoy, el alcohol es la primera adicción en la ciudad. El tabaco, la segunda”. Y continúa: “La realidad social ahí está. ¿Por qué debemos detener este debate?”.
“Es un tema impostergable”, agrega Granados, que insiste en que el enfoque de la izquierda pretende pasar de la criminalización a las políticas de salud pública.
En el encendido debate sobre la marihuana se ha hablado mucho de competencias. El DF se enfrenta a una complicada situación legal, semejante a los Estados de EE UU que permiten el consumo y que quedan a merced de un Gobierno central que decide (o no) hacer la vista gorda ante algo prohibido por las leyes federales. El método aún debe decidirse en México: “Seremos muy respetuosos con las competencias”, precisa Granados. Y critica: “Lamentablemente estamos volviendo a un esquema central en la toma de decisiones a través de leyes generales”. “No podemos volver a caer en la trampa del centralismo con fórmulas de leyes generales, atando de manos a las entidades federativas. La única norma a la que estamos limitados para no ir en contra es la Constitución de la República, y los tratados y convenios internacionales”. Lo que no sea competencia local, aclara, sus diputados o senadores lo llevarán a sus respectivas cámaras.
Respecto a los posibles choques que una ley en el DF pueda tener con la legislación internacional, Granados repite que los políticos serán “muy cuidadosos”. “Estamos siguiendo la toma de decisiones internacionales. La Ciudad de México dio el paso que debían haber dado otras personas. Después del último Consejo de la OEA, una de las conclusiones es que los países de la región abran el debate en materia de drogas”.