ENCOD visita una zona en la periferia de Lisboa para descubrir la realidad de las personas usuarias de drogas inyectables con el Doctor Luís Patrício (Mala Da Prevenção).
Las salas de venopunción están aprobadas por ley en Portugal desde 2001, salas fijas y móviles, así como el análisis de las sustancias; pero después de casi veinte años, todavía no existen salas de consumo seguro en ninguna ciudad portuguesa, ni siquiera en Lisboa. Ya que los ayuntamientos no quieren perder votos por tratarse de un tema impopular y por la falta de cultura e interés de éstos sobre las buenas prácticas asociadas a las conductas en relación con las drogas.
Aún así, todavía quedan personas que dedican su vida al bienestar de otros que se encuentran en riesgo de exclusión social, en espacios informales que carecen de la infraestructura para poder dar un buen servicio, personas como el Doctor Luís Patrício y la iniciativa que lidera, Mala Da Prevenção.
Con una prestigiosa carrera a sus espaldas, todavía él continúa visitando los lugares más necesitados de los alrededores de Lisboa, normalmente, lugares abandonados, en zonas paupérrimas que siguen siendo el punto de encuentro de las personas usuarias de heroína y otras drogas inyectables.
Estos lugares, se encuentran perseguidos por las autoridades, aún sin dar una respuesta alternativa para estas personas. Gracias al Doctor Luís Patrício, pudimos visitar uno de éstos y percibir la desatención por parte de las instituciones de los colectivos vulnerables en relación con las drogas.
Pues allí encontramos un antiguo edificio público abandonado, del que no podemos facilitar la dirección por miedo a las represalias policiales. Un lugar insalubre, en condiciones higiénicas deplorables, un foco de infección de enfermedades como VIH o Hepatitis.
Ya desde la calle, se ven las jeringuillas usadas en el suelo, accesibles a cualquier persona que pueda pasar por la calle o a un niño pequeño que pudiera estar jugando en los alrededores. Además el local fue primero ocupado por los usuarios y posteriormente clausurado por las autoridades, o sea, ahora aún más peligro, porque para acceder al lugar, se necesita sortear diferentes obstáculos, además de un muro de dos metros por el que hay que saltar para acceder. Esta entrada se encuentra muy cerca de las vías del tren, incrementando los riesgos para su vida y para los de la comunidad.
El Doctor Luís Patrício nos explica que los agentes de prevención atienden a las personas en estos lugares. Les reparten utensilios para que sea una inyección segura y los trabajadores sociales les explican los riesgos en los malos usos de la sustancia. Pero esto no es suficiente.
Entre sus herramientas, podemos encontrar el maletín de prevención de riesgos en el ámbito de drogas de Mala Da Prevenção. El maletín contiene una guía básica de cómo abordar una intervención con personas usuarias de drogas; diversos objetos comunes, como una taza o una baraja de cartas, con los que hace entender de forma sencilla, los conceptos más complejos en materia de prevención de riesgos.
Conseguimos hablar con dos personas usuarias de heroína que nos explican cuál es su visión sobre la desatención de los usuarios, así como la peligrosidad e insalubridad de la zona. Ellos preguntan sobre una nueva trabajadora social que está trabajando en la zona porque quieren hablar con ella, evidenciando la importancia de los agentes de prevención en estos contextos.
El Doctor Luís Patrício viene denunciando esta situación desde hace más de veinte años y las salas de venopunción en Portugal están aprobadas por una ley estatal de 2001. Pero todavía ningún ayuntamiento ha implementado la ley o ha dado respuesta a estas personas. Ahora, dieciséis años después, el Ayuntamiento de Lisboa se está planteando hacer la primera en Mouraria, zona cercana al centro y que tradicionalmente ha sido un lugar muy frecuentado por personas usuarias de drogas fumadas, no inyectadas. Esta sala se quiere construir más por razones políticas que prácticas, lo que critican los expertos, por su reprobable eficacia.
En la actualidad, los focos principales se encuentran en otros barrios más alejados del centro, donde verdaderamente hay un enorme trabajo por hacer por los agentes de prevención y por las instituciones, para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y las ciudadanas de Lisboa, a través de modelos como las salas de consumo seguro para focalizar y facilitar el trabajo en materia de prevención y reinserción.
By Ana Afuera Gómez
ENCOD (European Coalition for Just and Effective Drug Policies)