Fuente: La Razón
27 de febrero de 2012
Luis Mealla / La Paz
Gobierno busca industrializar la coca a través de tres proyectos
El Gobierno, mediante la Dirección General de Control de Coca e Industrialización (Digcoin), anunció la ejecución de tres proyectos para dar valor agregado a la hoja milenaria; se abrirá una fábrica de mate de coca, se producirán cereales y medicinas.
Bimate se llamará el producto que saldrá al mercado en tres meses; Rómulo Maraza, jefe de la Unidad de Industrialización de Digcoin, dependiente del Viceministerio de la Coca, aseguró que este proyecto está en su última fase de implementación.
“Con estos proyectos se inicia formalmente la industrialización de coca en Bolivia. Para el Bimate, la maquinaria de la fábrica está lista a ser montada, hay recursos y los planes de mercadeo están hechos”, señaló.
Se tiene previsto que la Gobernación de La Paz y la Asociación Departamental de Pro- ductores de Coca (Adepcoca) conformen una empresa mixta para ejecutar el plan, con una inversión de Bs 2,4 millones.
Además, hasta fines de 2012 se busca implementar otros dos planes: elaborar cereales hechos con coca y bebidas energizantes para el desayuno escolar, además de fabricar un calmante y antinflamatorio en base al alcaloide.
Maraza explicó que este tipo de acciones son necesarias en la actual coyuntura para que la coca “deje de ser satanizada en el ámbito nacional e internacional”.
Lucio Copa, técnico de Digcoin, dijo que para la instalación de la fábrica del Bimate, la Gobernación aportó con la maquinaria y Adepcoca con los predios, que están ubicados en Villa El Carmen, La Paz.
Se trata de un galpón que se está adecuando según normas nacionales de producción. “El Senasag ya ha dado las recomendaciones y la maquinaria es de industria nacional de última generación. En 90 días entrará en funcionamiento”, dijo Copa.
Para el gasto de operaciones se cuenta con 360 mil bolivianos, además de Bs 1,1 millones que financió la Gobernación para adquirir equipos y maquinaria.
Por su parte, María Luz Canelas, también del Digcoin, explicó que por año se requerirán 73 toneladas de coca y 24 de estevia para la elaboración del Bimate.
“Por año se espera producir 95.220 cajas de Bimate, cada una de 20 unidades; se tendrá una presentación para el consumo local y otra para mercados en el exterior del país”, detalló.
En tanto, su colega César Santos agregó que esta labor incentivará la producción de estevia en Caranavi, además de coca orgánica (que no usa abono o fertilizantes químicos), y que según él, es “más sana y natural”.
Explicó que se trabajará con productores de Nor, Sud Yungas y cocaleros de Cajhuata, en la provincia Inquisivi, todos afiliados a la regional de Adepcoca.
“Para el consumo nacional se usará la coca convencional, con ciertos requerimientos de salubridad; sin embargo, para un producto de exportación sí se necesitará coca orgánica o ecológica que debe ser certificada”, dijo.
Proyectan hacer un cereal escolar y medicamentos
La Unidad de Industrialización de Digcoin proyecta montar una planta de producción de cereales compuestos por quinua, amaranto y hoja de coca para innovar este alimento en el desayuno escolar; además, busca fabricar un calmante y desinflamante con base en el alcaloide de la planta milenaria.
Las propuestas están en plena etapa de elaboración y se estima que entre el segundo semestre y fines de esta gestión se tenga el diseño final de ambos proyectos para su posterior ejecución a nivel industrial.
César Santos, técnico de Digcoin, explicó que junto a los cereales está la elaboración de jugos energizantes hechos con el extracto de la coca.
Sin embargo, reveló que se trata de un plan que se viene aplazando desde 2010, ya que no se pudo ejecutar por falta de financiamiento.
“El proyecto está siendo actualizado y se enfoca en combinar las propiedades de productos andinos como la quinua y el amaranto con los beneficios nutricionales de la coca. Apuntamos a la población infantil, por eso sería ideal implementarlo en el desayuno escolar en forma de hojuelas, que será un perfecto complemento en la alimentación”, señaló.
El funcionario explicó que para asegurar el consumo en la población, este producto debe ser mezclado con otros alimentos, ya que la coca tiene un poder sinérgico, es decir que se combina bien con cereales.
“Además, el costo de la coca está un poco elevado y si sólo hacemos cereales de este producto no sería un proyecto rentable”, aclaróEn el caso de las bebidas, explicó que el plan para elaborar el producto está siendo elaborado y que su lanzamiento se hará en esta gestión, además sería una mezcla de coca y maca que aumentará el valor nutricional y energético del producto.
Medicamento.
El alcaloide de la coca también podría ser usado para fabricar un analgésico-desinflamante. María Luz Canelas aseguró que en unos meses se realizarán las pruebas del producto, destinado sobre todo a deportistas y reumáticos.
“Se lo presentará como un atomizador de uso tópico, se desarrollará el producto según culminemos el perfil; estamos en la petición del presupuesto para la ejecución. Puede ser que hasta fin de año el medicamento sea lanzado; no descartamos tener una fábrica propia o hacer convenios y trabajar con otra empresa”, dijo.
200 personas producen coca orgánica y ecológica
En el municipio de Shinahota, en el Chapare cochabambino, unas 200 personas se dedican a producir coca orgánica, según informó la Unidad de Industrialización de la Digcoin.
El objetivo es destinar esa hoja a la elaboración, a corto y mediano plazo, de harina de coca, mates, energizantes, caramelos, pipocas y otros productos, en el marco del desarrollo alternativo en esa región tropical del país.
“Se trata de un proyecto del programa Evo Cumple con cooperación de Venezuela; estamos supervisando ese proyecto”, explicó Rómulo Maraza.
El alcalde de esa región, Rimer Ágreda, impulsó el proyecto para que toda la coca sea destinada a la producción en la planta de Padre Sama.
Proyecto. La planta tiene siete líneas productivas: la de licores, bebidas energizantes, extractos, ungüentos, mates, harinas, caramelos y texturizados (chisitos y pipocas).
“El Alcalde incentivó la producción de coca orgánica con cursos de capacitación; la planta produce 200 paquetes de 50 libras de coca semideshidratada. Lo primero que se está produciendo, desde diciembre, es la harina de coca, panetones y mates”, explicó la ingeniera María Luz Canelas.