EL BOLETIN DE ENCOD SOBRE POLITICAS DE DROGAS EN EUROPA
NR. 42 JUNIO DE 2008
CUANDO FALLAN LOS ARGUMENTOS, APARECEN LAS PROHIBICIONES
Estamos enfrentados a una política malintencionada disfrazada de una fachada de buenas intenciones. La seguridad y la salud pública son empleadas como argumentos para mantener políticas que resultan en el aumento de daños en estos mismos áreas. La real reducción de daños es incompatible con la prohibición.
Esto lo sabe el ministro de Salud Pública de Holanda, Ab Klink. Su propuesta de prohibir 168 especies de hongos psicoactivos en Holanda fue otra vez postergada el 29 de mayo, luego de que varios Miembros de Parlamento holandeses, apoyados por activistas, pusieron preguntas críticas al ministro que él debe responder en las próximas semanas. Todos los consejos de expertos (incluyendo la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes, de manera notable) han recomendado al ministro a no imponer una prohibición, puesto que ello muy probablemente causará un incremento de los riesgos para la salud pública y un aumento en el número de incidentes.
Cultivar tu propio cannabis como una forma de reducir el daño a la salud y la seguridad fue aceptado hace tres años por el parlamento belga. Una pieza de legislación fue introducida entonces que permitiría a cada ciudadno adulto a cultivar una planta de cannabis para uso personal sin que haya circunstancias agravantes. Sin embargo, las autoridades belgas no respetan esta legislación. Cuando los miembros de Trekt Uw Plant, una asociación legal de productores y consumidores de cannabis plantaron la semilla de su planta personal en la vía pública el 3 de mayo, Día de la Marcha Mundial de Marihuana en Amberes, fueron detenidos y acusados de “cultivar cannabis en la posible presencia de menores”. Dos días después, cuando repitieron la acción en un campo público sin presencia de menores, la policía intervino contra lo que se llamó la “privatización del espacio público”. En la prensa la portavoz de la policía de Amberes dijo: “no es porque el cultivo de cannabis es tolerado que efectivamente vamos a permitir a que la gente lo haga.”
Hasta el Director Ejecutivo de la ONUDD Antonio Maria Costa ahora ha abrazado a la reducción de daños y se ha presentado a la Conferencia Anual de la Reducción de Daños que se realizó entre el 10 y el 14 de mayo en Barcelona. La reducción de daños es un concepto con el que todos pueden estar de acuerdo siempre que se ignoran a ciertas implicaciones lógicas de esta política. A través de un manifesto para una verdadera política de reducción de daños algunas asociaciones españolas de consumidores de drogas asícomo ENCOD han tratado este asunto en la Conferencia de Barcelona.
Cuando resulta que el daño no solamente se produce por las drogas mismas pero también por el hecho de que son ilegales, se pone más difícil encontrar cualquier acuerdo universal. Y cuando las propuestas para reducir daños relacionados a las políticas de drogas son hechas fuera del alcance de la industria de salud pública y privada, el ambiente se llena de nerviosismo y verguenza. De repente las personas se dan cuenta que en el sistema actual la reducción de daños es un acto de resistencia que puede poner sus carreras en peligro.
La única forma de avanzar es cuando se introduce esta realidad al debate sobre las drogas. De hecho las experiencias de ENCOD en la segunda sesión del Foro de la Sociedad Civil sobre la Política de Drogas de la UE los días 20 y 21 de mayo demuestra que a veces puede haber una discusión real con las autoridades, hasta con personas que representan organizaciones proihibicionistas. En este foro puede ser que hemos empezado ser aceptados como un problema necesario, gente cuyas propuestas radicales no pueden emplearse para nada sin romper el marco general, pero gente quien contribuye, en realidad, con asuntos interesantes
Al nivel de la ONUl,el representante de ENCOD Fredrick Polak está jugando un papel similar, repitiendo su pregunta al Director de la ONUDD Costa por tercera vez en barcelona durante la Conferencia de la IHRC: cómo se puede explicar el consumo relativamente bajo de cannabis en los Países Bajos donde esta sustancia es legalmente accesible para adultos. Actualmente, tal como escribimos antes, Costa ahora ha visitado a Holanda para encontrar una respuesta a esta pregunta. En los días después de la Conferencia en Barcelona, público un documento en su sitio web con el título: “Amsterdam, ciudad de tolerancia, que endurece las reglas”. Luego de algunos días despareció del sitio, aparentemente después de que el gobierno holandés se había rechazado de aceptarlo. El documento de Costa es meramente uno de mantras repetidas interminablemente de prohibicionistas, completamente careciendo de prueba científica alguna.
La Asamblea General de ENCOD en Vitoria, organizada en cooperación con el gobierno regional del país vasco, llega al momento justo de tomar el próximo paso en el desarrollo de ENCOD como una red de acción para extender la semilla de duda entre la población general a fines de sugerir que tal vez la prohibición a lo mejor no es la mejor respuesta al final.
Es posible desafiar la prohibición de drogas con pocos recursos pero con una actitud determinada y con profesionalidad creciente en como formular un mensaje a difundirlo. El uso de plantas y sustancias siempre ha sido una parte esencial de las sociedades humanas por todas partes, algo que no se puede prohibir por gente en uniformes negros ni monopolizar por gente en uniformes blancos. Manteniendo la idea de un mundo en que las personas pueden manejar la producción, distribución y consumo de sustancias de una manera responsable, se pone en marcha un treno colectivo de pensamientos hacia el fin de mejorar la situación actual.
En Marruecos se formó una plataforma de ciudadanos para la legalización de cannabis, consistiendo de profesores universitarios y activistas de derechos humanos. Han juntado suficientes pruebas para poder mantener que cultivar cañamo para fines industriales y cannabis para fines terapéuticos es una opción sostenible para desarrollar las áreas pobres en las montañas del Rif. Los actuales programas destinados a erradicar el cañamo, ejecutados bajo presión de la Unión Europea, solamente contribuyen al incremento de la pobreza e ingresos más altos para las organizaciones criminales.
En el Perú, la diputada y anterior dirigente cocalera Elsa Malpartida ha juntado las pruebas de un alto número de violaciones de derechos humanos cometidas durante las operaciones de erradicación de hojas de coca en los últimos 8 años, y ha denunciado al gobierno peruano ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Por primera vez en 30 años, esta Comisión ha aceptado los reclamos y los investigará.
Al mismo tiempo nosotros en Europa deberíamos continuar a desafiar la prohibición como política de “negligencia criminal” que está causando dos daños mayores a la sociedad:
El control del mercado de las drogas en manos de sindicatos criminales con todo lo que consigue, incluyendo violencia entre bandas rivales, corrupción de oficiales, un despilfarro significante de esfuerzos y presupuestos de policía y aduanas, problemas bancarios y monetarios relacionados al blanqueo de dinero etc.
La imposibilidad del control de calidad, que causa la prevalencia de productos de mala calidad, muchas veces mezcladas con productos muchos más peligrosos, que resultan en serios problemas de salud.
Por Joep Oomen (con la ayuda de Peter Webster)